Los 10 mejores hoteles en castillos de España
¿Te apetece darte una vuelta por este entorno y pasar la noche al estilo cortesano? ¿Dormir en un castillo medieval?

¡Exacto!
Dormir como un noble medieval ya no es un cuento de hadas, aunque sí vas a necesitar algunos Florines para pagar la estancia de fin de semana.
Si quieres darte un chapuzón en esta parte de la historia, quizá te preguntes cosas como:
- ¿Cómo se vivía en un castillo en la Edad media?
- ¿Dónde están estos castillos tipo hotel?
- ¿Cuánto cuestan?
O, incluso quieras descubrirlos más a fondo antes de lanzarte a por ellos. Y nos parece perfecto.
Los castillos hoteles son experiencias que merecen ser bien elegidas, porque cada uno te cuenta leyendas que quizá no tengan nada que ver con las de otro.
En esta ocasión, te vamos a pedir que te dejes llevar por la Península Ibérica de forma mucho más libre y romántica. Siguiendo el orden que hemos preparado para que encuentres tu mejor opción, sin condicionarte.
Eso sí, estos paradores son auténticos castillos y monasterios de la Edad Media, nada de nuevas edificaciones, dentro de la ciudad que simulan paredes de bloque. ¿Estás preparado?
#1. El Parador de Olite (Navarra)
Si hay un lugar en la historia de España que nos seduce inmediatamente cuando pensamos en la Edad Media, es el de los reinos cristianos del norte, en cuyas tierras las gentes se resistían a los avances musulmanes y se planeaban las acciones de la Reconquista.

Con armaduras y preciosos jardines recibiéndote, el Castillo de Olite, en Navarra, es uno de los imperdibles del Medievo.
Sus majestuosas chimeneas de piedra en las estancias y sus amplias habitaciones, te transportan nada más entrar, al ambiente más caballeresco y noble de la época.
No te quedes con las ganas y concédete, además de un par de noches en esta maravilla de hotel castillo, un pedazo de la deliciosa cocina gourmet que te sirven dentro de sus dependencias.
Tu estómago y tu boca harán más fiestas que el mismo Carlos III, el Noble, el rey de Navarra que lo hizo sede real y lo elevó a uno de los castillos más bellos de Europa.
#2. El Castillo de Santa Catalina (Jaén, Andalucía)
¿Sabías que la provincia de Jaén es la que concentra mayor número de castillos en España?

Su enclave, en la misma Sierra Morena, era decisivo tanto para las contiendas como para la defensa del territorio cristiano en toda la conquista, avance y expansión de los reinos que ocuparon la Península.
Por encima de un mar de olivos y sobre la pura roca del cerro, el hotel Castillo de Jaén maravilla con su atento restaurante, sus vistas de águila y su inolvidable Torre del Homenaje.
Date un paseo por la Andalucía más oriental. Da forma a tu viaje medieval durmiendo en este monumento arquitectónico que pasó por manos de íberos, musulmanes y, finalmente, cristianos. Un entramado de historias para pasar un fin de semana mágico con tu pareja.
¿Te imaginas la mezcla mágica de estilos que envuelven cada noche?
#3. El Castillo de Somaén (Soria, Castilla y León)
En la elegante Castilla y León, en la provincia de Soria, el Castillo de Somaén se erige sobre una atalaya, posiblemente de origen musulmán, sobre un estratégico cerro alargado.

Con chimenea de leña en todas las habitaciones y calefacción radiante en el suelo, la estancia se transforma en una visita digna del huésped más selecto de la corte.
Pásate y descubre esta posada de lujo que hechizará con su halo medieval la velada romántica que queráis, gracias a la intimidad que desprende, en mitad de un encantador y tranquilo entorno rural.
#4. El Castillo del Buen Amor (Salamanca, Castilla y León)
El Castillo del Buen Amor en Villanueva de Cañedo, es una antigua posada real donde, según cuenta la leyenda, el arzobispo de Santiago, Alonso de Fonseca, y María de Ulloa, su prima amante, consumaron un amor prohibido, de esos que se hacen imposibles y, por consecuencia, irrefrenables.

Se denominó del Buen Amor porque tanto estos dos amantes como el obispo que lo arregló y su esposa, mantuvieron vivos sus respectivos amores en él.
Así que si te llama poderosamente la atención el nombre y tú también quieres hacer historia en honor a la leyenda, no lo dudes y date un paseo por el Castillo del Buen Amor.
#5. El Parador de Cardona (Barcelona, Cataluña)
Si prefieres dormir en un castillo en Cataluña, tienes que conocer el Parador de Cardona.

En este castillo, sobre un pequeño monte, cuenta la leyenda que una joven cristiana y un príncipe musulmán se enamoraron y se juraron amor eterno a escondidas.
Sus salas austeras y pasillos largos te trasladan diez siglos en el tiempo para que respires el ambiente donde los amores prohibidos y los amantes enamorados sellaban su amor de la forma más romántica que se les ocurría.
Si quieres dormir y reencontrarte con la época donde los cristianos y los musulmanes decidían qué hacer con la sinuosa área catalana, el parador de Cardona es tu hotel castillo para sentir el amor con tu pareja.
#6. Parador de Monforte de Lemos (Lugo, Galicia)
Este parador de lujo, restaurado en un antiguo monasterio benedictino del siglo XVI, se sitúa a escasos pasos del Castillo de Monforte de Lemos.

Si tienes la suerte de hospedarte es pedazo de historia Gallega, disfrutaras tanto de las panorámicas del pueblo como de la historia y museo del Castillo, casi sin moverte de la estancia.
Altamente recomendable si, además de apreciar las comodidades y buen servicio del parador, quieres conocer a fondo a la historia y la cultura de la Tierra de Lemos y la Ribeira Sacra.
Si quieres saber en más detalle cómo el castillo que envuelve este parador, puedes conocer su historia, aquí: Castillo de Monforte de Lemos.
#7. Residencia Real del Castillo de Curiel (Valladolid, Castilla y León)
Este interesante castillo, antiguo bastión de protección para repoblar la zona, perteneció a diferentes monarcas durante la Edad Media, las primeras referencias que se tienen de él, son del siglo XI, en plena reconquista.

Hoy en día, los huéspedes pueden disfrutar de este increíble paraje en pleno Valle del Duero, donde además, se realizan visitas, guiadas y por libre con o sin bicicleta para conocer los viñedos y probar las deliciosas catas de esta zona vinícola.
Situado en lo alto del cerro desde el que puedes ver el pueblo de Curiel del Duero y el increíble Castillo de Peñafiel.
#8. Parador de Alarcón (Cuenca, Castilla la Mancha)
Esta fortaleza de origen musulmán del siglo VIII, sirvió desde el Emirato de Córdoba hasta los reinos taifas hasta que fue asediada y conquistada finalmente para los cristianos en 1184.

Es auténtico castillo medieval, lleno de cuentos y leyendas sangrientas, cada cual más plausible, lo que lo convierte en un mar de sensaciones para el visitante que se desea hospedarse aquí.
¿La ventaja? Ya solo te queda dejarte imbuir por su historia y disfrutar de la confortable estancia, y de las vistas al río Júcar y pueblo de Alarcón.
#9. Castillo de Monda (Málaga, Andalucía)
La restauración de esta antigua fortaleza Nazarí del siglo XII, hace las delicias de cualquier huésped que solo desee el descanso en un lugar cerca de Marbella y su calurosa agradable «costa de interior».

También llamado Castillo de la Villeta, su localización es inmejorable y su lujo y servicios también. Aunque el mismo hotel se edificó integrando la fortaleza, parece ser que los promotores del momento no tuvieron demasiados miramientos en respetar el estudio arqueológico del sitio.
Es patrimonio histórico español desde 1948 y lo mejor del recinto, son las decoraciones al más puro estilo «Reino Nazarí de Granada» y sus increíbles vistas desde la colina.
#10. Castillo de Bulbuente (Zaragoza, Aragón)
Este hotel tipo castillo de la comunidad de Aragón se encuentra a 53 Minutos en coche de Zaragoza.
Esta torre medieval se construyó en el siglo XII y posteriormente, en el siglo XV se amplió como palacio de Abades, con bodega y jardines.

Sin duda la escapada rural perfecta para una pareja o para disfrutar en familia gracias a sus habitaciones familiares y las actividades que se prestan en un entorno natural donde el senderismo y las visitas culturales a los monumentos medievales, resultan más que interesantes.
A 38 Km de Tudela, es perfecto para quedarte unos días disfrutando de la gastronomía local, la tradición y el descanso en un hotel castillo con todos los servicios y un lujo por todo lo alto.
Espero que esta guía de los mejores hoteles castillo de diferentes regiones te haya servido. Sin duda, una selección exquisita. ¿Elegiste ya el tuyo?
¿Qué es un hotel castillo medieval?
Imagina que te despiertas por la mañana, súper descansado, con la primera luz del sol. Dormiste en una cama de estructura de madera, con un fino dosel que la resguarda, donde el colchón se amolda a tu cuerpo.

A tus pies y a unos metros, gruesos muros de piedra soportan ventanas de alabastro, y un silencio te envuelve en una atmósfera tranquila, serena y relajante.
Suena bien, ¿verdad?
Ahora imagina que plebeyos, caballeros y princesas se entremezclan en los pasillos, que hablan de las próximas Cruzadas, y que las intrigas de palacio se murmuran al otro lado de la puerta de madera de tu habitación, cerrada con llave.
¿Te haces una idea?
Si la respuesta es sí, posiblemente te encanta desentrañar los secretos de la Edad Media y has pensado mil veces en cómo sería vivir en aquel periodo.
Y quizá te hayas sumergido alguna vez en un viaje inolvidable a la época medieval, gracias a la habilitación de los castillos medievales y la posibilidad de visitarlos.
Visitar un castillo y salir por la misma puerta al cabo de un rato está muy bien.
Pero, ¿te imaginas quedarte en él, y experimentar de primera mano los ambientes donde dormían, comían y conversaban sus habitantes?
Si quieres zambullirte en una experiencia medieval sin renunciar al descanso de una buena cama, los hoteles castillo son ideales para ti.
- Habitaciones con camas suaves como algodón en los antiguos aposentos. Baños que hechizan, hidromasajes que revitalizan, y desayunos de reyes.
- Relajarte y salir de la rutina en un entorno natural y con todo lujo de detalles medievales, sin renunciar a un servicio de categoría.
- Desconectar del día a día y regalarte un capricho en una dependencia real que hoy es una encantadora habitación de hotel de lujo.
Si te gusta comer bien, dormir mejor y hacer todo un viaje en el tiempo que haga volar a tu imaginación, déjanos decirte que tienes que disfrutar, si aún no lo has hecho, de una estancia en un hotel castillo.
El hotel castillo habilita las estancias originales de un castillo, siempre respetando su esencia, y las transforma en un hotel donde disfrutar de una buena gastronomía, con un servicio de cuatro o cinco estrellas y un ambiente revitalizante para el descanso.
Toda una apuesta para los amantes de la historia medieval que adoran la comodidad de un buen hotel.
¿Por qué un hotel en los castillos de la Edad Media?
En los castillos medievales la nobleza dormía al cobijo de piedra chancada, con una sigilosa intimidad de los espacios.

Solo las paredes conocen mejor que nadie el laberinto de acontecimientos que entre ellas sucedían.
- Los juglares cantaban las hazañas de caballeros y damas. Hablaban de ese trágico amor cortés de la Edad Media, como los de Tristán e Isolda, Lanzarote y Ginebra.
- Los reyes organizaban ostentosos banquetes con la caza del día para impresionar a sus comensales o para celebrar sus matrimonios de conveniencia.
- Cortesanos e hidalgos de bragueta (hombres que eran nombrados nobles si tenían siete hijos) hacían vida en los castillos medievales, auténticas fortalezas rodeadas de bosques y mesetas.
Las llanuras colindantes presenciaron toda esa historia europea y española que te pone los pelos de punta, sobre todo cuando te da por investigar y tu mente vuela a aquellos escenarios, de batallas y ataques con cielos limpios y fosos amurallados.
La historia medieval es interesante por las costumbres, las prácticas y los sucesos que marcaron un antes y un después en la especie humana.
Las condiciones de vida eran duras, con fríos invernales, nevadas que obligaban a resguardarse y guerras constantes que soliviantaban a las gentes y que traían epidemias y enfermedades.
Si has visitado algún castillo, posiblemente te hayas encontrado preguntándote a ti mismo: ¿Cómo podían vivir así?
Es apasionante darse cuenta de cómo ha cambiado todo en mil años.
Mucho más apasionante te resultaría lanzarte de cabeza a los lugares donde todas estas curiosidades y hazañas se hacían reales.
Por suerte, ahora no tienes que pasar tanta calamidad y, si te da por dormir en castillos, tu estancia será bien distinta en cuanto a comodidad.
Viaja a pasajes inauditos de la historia medieval, huele y escucha lo que cuenten las paredes de piedra y otea el paisaje que las mismas torres vigías divisaban. Removerás tus sensaciones más recónditas. Despertarás tu hambre de experiencias.
Estarás de acuerdo con nosotros en que vivirlo desde por la mañana hasta por la noche se torna mucho más auténtico que quedarse con un par de horas de visita guiada.
Regálate el lujo de hacerlo sin renunciar a los placeres de la vida: comer estupendamente, descansar en una buena cama, y escaparte de la rutina un fin de semana en un castillo medieval.
¿Por qué alojarse en un hotel castillo medieval?
Un hotel castillo medieval se convierte en el alojamiento rural al que te escapas con la familia, con amigos o en pareja cuando quieres hacer algo diferente, con el aliciente de descubrir los secretos de la Edad Media.
Si te gustan los viajes con encanto, quieres quedarte en España y te fascinan los castillos, solo es cuestión de dar con las ofertas del momento.
Dormir en un castillo medieval añade una caricia de lujo a sentirte como en casa en la Edad Media.
Tu viaje se convierte en una apacible pero intensa estancia que ni el mismo Ramiro I de Aragón creería si levantara la cabeza, gracias a las bondades de la hotelería española actual.
Límpiate de cargas diarias, viaja a otros escenarios como atento espectador silencioso y déjate envolver por su magia.
- Duerme a pierna suelta.
- Come mejor que un rey.
- Déjate mimar por quien te atiende de maravilla.
Y es que la mayoría de hoteles castillo son Paradores de España, por lo que cumplen con altos estándares de acogida, servicio y gastronomía. No se puede pedir más.